EVOLUCIÓN CULTURAL Y EVOLUCIÓN BIOLÓGICA

      

                               EVOLUCIÓN CULTURAL Y EVOLUCIÓN BIOLÓGICA

          

Hace 200.000 años surgió el homo sapiens como una rama evolutiva del género Homo. La evolución había favorecido en él un cerebro grande, el más grande en proporción a su tamaño corporal, el de más alto índice de encefalización respecto al del resto de los animales.

Ese cerebro ha desarrollado funciones de sociabilidad, creatividad, capacidad de adquisición de conocimiento, y lenguaje, entres otras funciones tanto cognoscitivas como de relación con su medio. Esas funciones le ha llevado a crear cultura,  y poder transmitirla a la progenie generación tras generación.

Su capacidad creativa ha propiciado la gran cantidad y diversidad de nichos culturales que ha ido creando a lo largo del tiempo y de los diferentes escenarios a lo largo del planeta.

Estas capacidades no surgieron de repente, bruscamente. Son evoluciones de capacidades previas, que ya desde hace más de 4 millones de años se han ido desarrollando.

Un cerebro mayor es la base física necesaria para conductas complejas, como la fabricación y mejora de herramienta, el pensamiento abstracto, las relaciones sociales,  el lenguaje, la conciencia de uno mismo.

En ese proceso de aumento paulatino del tamaño cerebral, el cerebro de los homínidos comenzó a desarrollar los lóbulos frontales, por acumulación de mutaciones genéticas ya en los australopitecos, hace 4 millones de años, que les permitió caminar sin apoyo en nudillos de miembros anteriores, y seguir trepando a los árboles, tener libres brazos y manos para usar palos y piedras… crear nuevas estrategias grupales de alimentación…

Estas interacciones de nuevas habilidades y el cerebro iban creando nuevas conexiones en éste, la actividad cerebral iba aumentando a medida que las nuevas experiencias de interacción social y con el medio de diversificaban. Los homínidos fueron aprendiendo más y más.

Nuevas mutaciones favorecieron el aumento de habilidades manuales, la posición del pulgar a cada uno de los otros dedos…

Todo ello fue haciendo aparecer al homo habilis, por cambios acelerados del ADN en alguno australopitecos, hace 2 millones y medio  de años. Como consecuencia se produjo un nuevo aumento del tamaño relativo del cerebro.

Hay investigadores que ligan estas modificaciones cerebrales con la fabricación de herramientas, otros con la bipedestación otros con la evolución social , otros con el lenguaje, características del cerebro Homo que han sido seleccionadas por la evolución constantemente.

Son las funciones cerebrales las que propician la capacidad cultural. Y esa capacidad cultural es la que la selección natural  “selecciona”, favorece , y hace que vaya mejorando su índice de encefalización, así como aumentando el volumen de  corteza cerebral.

Es un proceso de interacción continua entre la cultura de los humanos y su mejora cerebral.

El salto cualitativo hace 200.000 años, en el homo sapiens, supuso un aumento en capacidad de abstracción, de desarrollar lenguaje, de crear conceptos. Ello le ha permitido crear y desarrollar normas de convivencia y cultura cada vez más refinada que transmite con el lenguaje a sus descendientes.

Con la expansión del homo sapiens de África hacia Asia , Oceanía, luego a Europa, y más tarde a América, la explosión de modelos culturales, de creatividad social , no sólo artística, ha sido imparable.

La cantidad de lenguas que fue creando cada grupo humano, la mayoría ya desaparecidas, supuso una forma de entender el mundo y contarlo para que así lo entendieran sus respectivos descendientes.

Cada cultura creada por los diferentes grupos humanos influye en sus forma de entender  el mundo que le rodea y en su forma de vivir y adaptarse al medio ambiente. Por ello influye en la selección natural de los diferentes grupos humanos, favoreciendo unas culturas sobre otras. Ha sido así desde la prehistoria, sigue siendo así en los periodos históricos que ya podemos analizar gracias a los registros escritos que vamos dejando como rastro cultural.

La cultura de cada grupo social hace que la interacción de sus integrantes con el medio tenga unas características determinadas. Influye en el tipo de alimentación, crea un sistema de creencias que le permite relacionarse con el medio y entenderlo, así como guiar las interacciones sociales entre sus miembros…,

Así es como los miembros de esta especie Homo  transmiten a sus descendientes no sólo el legado genético, sino también el legado cultural.

Y será la interacción de ambos la que influirá en la adaptabilidad futura al medio. Esa interacción es la que estará sometida a la selección natural.

Ejemplo claro lo tenemos en nuestra propia cultura capitalista actual, que en el proceso de degradar el medio ambiente en pro de acumular riqueza material la selección natural hará lo que siempre hace, favorecer al grupo poblacional que mejor se adapte al medio.

La enorme variabilidad cultural humana es la que puede propiciar un cambio de tendencia.